La insoportable inseguridad nuestra de cada día.

Las teorías de la inversión se han quedado cortas para explicar la realidad actual. La teoría clásica, expresa que si bajan las tasas de interés la inversión debería reanimarse, pues resulta que para los tomadores de decisiones en este sentido las tasas bajas no son suficiente incentivo para sacar el dinero o pedirlo prestado para invertir.

Además, requieren de seguridad y la seguridad es un aspecto emocional. Por eso, la economía ha abrazado a la psicología como ciencia auxiliar hasta el punto de que existen varios profesionales de esta ciencia del saber que  tienen su nombre de premiados por el Banco Central de Suecia por sus aportes la economía.

La unidad más sencilla del análisis microeconómico sigue funcionando por incentivos, pero la avaricia no es suficiente. Actualmente, se están desarrollando nuevas áreas del conocimiento que expanden las fronteras de la ciencia sombría como la catalogó en una ocasión el filósofo inglés Thomas Carlyle. 

Incluso hay organismos multilaterales de financiamiento que tienen dentro de su menú académico online cursos de economía del comportamiento en los que exponen políticas diseñadas a la luz de esta disciplina que buscan modificar conductas en la población con el fin de alcanzar objetivos de políticas públicas.


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