Cuando te digan que me fuí

Jo de Gustave Courbet Cuando te digan que me fuí, no dudes nunca que te llevaba en mi recuerdo apenas recuperaba la conciencia de esos cortos sueños de los que sueles ser protagonista estelar. No dudes nunca que buscaba tus ojos en el mar, ni que mi corazón se agitaba como el de un colibrí cuando me escribías. No dudes en que al caminar contigo por alguna calle hacia mi mejor esfuerzo para que me dieras una de esas sonrisas capaces de consolar ni ser en perpetuo tropel, ni que te recordaba en cada rosa, cada ocaso, en la sonrisa de una niña, en cada ola de mar. Ni dudes en la inquietud que me generas cuando dices extrañarme. Nunca dudes de la verdad de lo que siempre te he escrito: Irrumpiste de repente en mi y jamás te irás así lo quieras tu. Si te cuentan que me fuí, no dudes nunca de que mi último aliento se fué pronunciando tu nombre